Conoce aquí los 5 riesgos de operar sin inmobiliaria. Si quieres vender tu casa por tu cuenta y sin la asesoría de una inmobiliaria puede parecer una muy buena opción al principio. Debido a que puedes hacerlo a tu manera y, también, tienes la posibilidad de ahorrar costes. Sin embargo, no es recomendable que vendas tu casa por ti mismo, ya que esto puede conllevar serios riesgos.
La cantidad de conocimiento, recursos y habilidades adquiridas gracias a la experiencia de un agente inmobiliario son inestimables. A pesar de que es entendible que cueste confiarle la venta de un inmueble a otra persona, suele ser lo más aconsejable.
Al momento de decidir si contratar o no a una inmobiliaria, el comprador tiene una serie de beneficios. Estos son conseguir mejores ofertas, tranquilidad y seguridad legal, menores tiempos de compra y negociación profesional ante ofertas del mercado.
En este artículo, podrás ver los principales riesgos de operar sin inmobiliaria tanto para la compra como para la venta de una propiedad. Luego de esto, podrás tomar una mejor decisión con respecto a si prefieres contratar a una inmobiliaria o no.
Los 5 riesgos de comprar o vender una propiedad sin inmobiliaria
Riesgos
Concretar una operación inmobiliaria implica mover grandes cantidades de capital, con los riesgos de seguridad que esto supone. Por lo tanto, la manera de asegurarse de no correr riesgos del capital durante la operación es que un elemento tan importante como la reserva lo guarde la inmobiliaria. De esta forma, se hace responsable de traspasar el dinero de comprador a vendedor o de devolverlo cuando la operación se caiga.
Más allá de la verificación de identidad, en la actualidad hacer una operación inmobiliaria por cuenta propia es inseguro. Debido a que, a los riesgos del movimiento del efectivo se le suman los peligros de dejar entrar a un desconocido al inmueble. En cambio, cuando se contrata una inmobiliaria va una persona que sabe cuánto tiempo lleva mostrar una vivienda. Y, para los malintencionados tienen el conocimiento de que es más fácil entrar a una casa en la que está sólo el dueño.
Estado de la documentación
La veracidad y la circunstancia de la documentación es uno de los conflictos más frecuentes que se producen durante la compraventa de propiedades. La actividad no se reduce sólo a conectar comprador con vendedor, sino que también requiere conocimiento en temas legales y contables.
El mayor riesgo para las partes es la documentación que se firma, ya que se sabe que hay casos donde hubo falsificación de documentación.
Actualmente, las propiedades pueden tardar entre tres y seis meses promedio en venderse. Sin embargo, aquellos inmuebles que tengan una mejor relación precio, producto y ubicación, pueden mejorar esos indicadores. Durante ese plazo, pueden aparecer factores que modifiquen la documentación.
Difusión y exposición
Los dueños que deciden vender sus propiedades por su cuenta pueden difundir estas entre sus conocidos, redes sociales y pueden publicarlas en internet. Aunque, no disponen de la red que tiene una inmobiliaria con clientes, consultas y ofertas disponibles en el mercado. Esto se refleja en plazos de venta más cortos. En cambio, un dueño que vende por cuenta propia tiene un recorrido muy largo hasta que todo el público comprador conoce su propiedad.
Por otra parte, los desarrolladores también acuden a inmobiliarias para promocionar proyectos que aún no están finalizados. En esta situación, el corredor inmobiliario suele participar desde el asesoramiento inicial hasta la concreción de las ventas.
Comisión
La comisión que se le paga a la inmobiliaria por gestionar la operación es uno de los principales aspectos por el que las partes deciden negociar sin intermediarios. Sin embargo, el asesoramiento es uno de los principales motivos por el que la gente acude a las inmobiliarias.
Por otra parte, si de igual manera se quieren asumir los riesgos y no contratar una inmobiliaria, probablemente ambas partes se van a ver obligados a contratar a un escribano para legalizar la firma de la documentación.
De todos modos, si quieres evitar cualquier tipo de problemas y asegurar una operación segura, es recomendable contratar una empresa inmobiliaria. Para elegir a la inmobiliaria correcta, es necesario que analices su trayectoria y no te quedes con la primera o la que menos cobra.
Tasación real
El conocimiento de mercado es un factor fundamental para definir el precio de venta de un inmueble. Por lo general, el propietario tiene la intención de cerrar la operación de inmediato, ya que no tiene la costumbre de vender inmuebles. Esto impide definir el precio competitivo para salir a comercializarse. Es por eso que, para el comprador, la tasación por parte de una entidad experimentada le da la tranquilidad de que se van a poner sobre la mesa las posibles reparaciones y eso se refleja en la tasación.
Además, las inmobiliarias no verían adecuado invertir recursos en difundir una propiedad que está sobrevalorada y a la que le deban bajar el precio.
Otros riesgos a tener en cuenta
No saber negociar
Si no tienes acceso a una herramienta de valoración y a los datos internos del mercado que tiene una inmobiliaria, es imposible que sepas cuál es el precio adecuado para tu vivienda. Esto puede desembocar en dos situaciones que te serán negativas. La primera es que la pongas demasiado cara, no teniendo compradores, y la otra es que la pongas demasiado barata, obteniendo menos dinero del que deberías.
Además, debes tener en cuenta que el comprador casi siempre es el que va a negociar. Por lo tanto, si te niegas rotundamente, perderás la compra y si no sabes negociar, seguro la venderás por mucho menos dinero.
Actuar sin conocer las leyes
Para poner una casa a la venta tienes que saber todo sobre cuestiones legales y contratos. Si no quieres contratar una inmobiliaria, tu serás el responsable de cada cosa que hagas. Esto puede producir que lo que firmes no sea lo más beneficioso para ti o, puede pasar que los compradores te demanden por cualquier problema. Además, muchos compradores directamente rechazan la compra porque el contrato que propone el propietario no les da confianza.
Para evitar todos estos problemas, lo más aconsejable es que contrates a un agente inmobiliario. Este será el que se responsabilice de los temas legales y, también, te informará sobre impuestos y otras responsabilidades que puedas tener.
No anunciarte bien
La publicidad y la difusión suelen ser dos problemas muy comunes en las personas que deciden vender propiedades por ellas mismas. Si no conoces las técnicas de marketing necesarias para anunciar tu vivienda y no tienes la red de contactos de una inmobiliaria, muy poca gente va a saber que tu casa se vende. Por lo que, mientras menos gente lo sepa, menos posibles compradores vas a tener.
Sin embargo, si decides contratar a un agente inmobiliario este problema se solucionará rápidamente. Debido a que él sabrá decirte qué detalles corregir para vender mejor tu casa, consiguiendo la venta mucho más rápido y con un mejor precio.
Esto quiere decir que, si decides vender tu casa por cuenta propia, lo más posible es que te tardes en efectuar la venta. Puedes tener pérdidas si tienes apuro en venderla y lo haces por menos dinero, o si no consigues compradores, adentrándote en gastos por impuestos.
La situación personal
Si deseas vender un piso tu mismo y estás mal de ánimo o no tienes tiempo, esto puede afectar la venta del inmueble. Un agente inmobiliario es la mejor alternativa porque brinda una visión objetiva y es una persona especializada en ventas.
Presentación del inmueble
Si quieres vender una propiedad, tienes que tener en cuenta que debe estar en perfecto estado para que agrades a los potenciales compradores. Necesitarás realizar tareas de limpieza y mantenimiento, para dar una sensación de orden, tranquilidad y confort.
Si decides contratar una inmobiliaria, la misma se hará cargo de todo y no te tendrás que preocupar por la presentación de la propiedad. Aunque, si lo haces por ti mismo siempre es un riesgo, sobre todo por el hecho de no quedar bien ante los visitantes.
Poder de convicción
Vender un inmueble también requiere de poseer ciertos dotes comerciales y por eso es necesario tener un gran poder de convicción. Por eso tienes que tener en cuenta dar una buena imagen y saber cómo entablar una relación con las personas. De todas formas, si quieres ahorrarte este trabajo y dejarlo en manos de profesionales, lo más recomendable es que contrates una inmobiliaria.
Ahora, después de leer nuestro post, ya conoces los 5 riesgos de operar sin inmobiliaria.
Redactor de comunicación para Emerxente. Estudios de Master en Marketing Digital y Social Media realizados en la Universidad Europea de Miguel de Cervantes. Mi pasión es ayudar a la gente en todos los aspectos del marketing online. Además, también trabajo como especialista SEO y SEM en Emerxente, ayudando a las empresas con el posicionamiento y el marketing de contenidos.