Puertas que se abren y cierran automáticamente al acercarse a ellas, aparatos eléctricos que se encienden y apagan simplemente deslizando el dedo por la pantalla del móvil o incluso grifos que que se abren solos para evitar la necesidad de tocarlos antes de lavarse las manos. La domótica ha pasado de ser una excepción o una excentricidad a instalarse en cientos de miles de hogares por todo el mundo. De hecho, es posible que vivamos en una de esas casas domóticas aunque no nos hayamos parado a pensarlo. Increíble, ¿verdad?
Qué es la domótica
El significado de la palabra domótica lo encontramos en el mismo origen del término, formado por la latina domus (casa) y la griega automatos (que actúa por sí mismo). La domótica, que últimamente se ha dado en conocer también como hogar inteligente o automatización del hogar, consiste, por tanto, en la aplicación de la tecnología para controlar de forma remota los sistemas de una vivienda. Dicho control puede llevarse a cabo mediante el uso de aplicaciones móviles, sensores de movimiento o incluso comandos de voz.
Para que podamos hablar de verdaderas casas domóticas, sin embargo, no bastaría únicamente con disponer de manera aislada de alguno de estos aparatos. La domótica, de hecho, es un sistema diseñado para comunicarse entre sí y con los usuarios a través de una red doméstica, a menudo utilizando tecnología inalámbrica. Por tanto, como sistema, debe estar compuesto por varios elementos que forman un conjunto.
Ejemplos de domótica
La domótica abarca una amplia gama de tecnologías, desde el control de la iluminación, la climatización o los electrodomésticos hasta la seguridad, pasando por los sistemas de entretenimiento, entre muchos otros. Estos son algunos de ellos.
Iluminación
Puede que sea la primera de las herramientas que se nos vienen a la mente cuando pensamos en casas domóticas. Y es que se trata de la manera más sencilla de empezar a modernizar nuestro hogar. No solo para encender y apagar las luces, sino para regular también su intensidad. A través del teléfono móvil y con una pequeña inversión para cambiar los interruptores podremos empezar daremos nuestro primer paso hacia la domotización de nuestra vivienda.
Termostatos para climatización
¿Llegar a casa y encontrarla cálida en invierno y fresca en verano? Con la domótica es posible. Gracias a los termostatos inteligentes podemos controlar remotamente e incluso programar su puesta en marcha y su apagado a través del teléfono móvil. Además de mejorar la calidad de vida en nuestro hogar, esto nos ayudará también a evitar los problemas de humedad en casa.
Persianas y toldos
Subir y bajar las persianas y los toldos puede resultar difícil para algunos. Y no estamos hablando de personas con limitaciones funcionales, sino incluso de personas perfectamente sanas que viven en inmuebles con grandes ventanales y quieren disfrutar de una oscuridad total por las noches o del fresco y la protección que ofrecen sus toldos. Para ellos, la opción de subir y bajar toldos y persianas de manera mecanizada y remota supondrá una notable mejoría en su calidad de vida.
Puertas y ventanas
Con una cerradura adaptada y un sensor de movimiento puedes hacer que las puertas se abran y se cierren a tu paso. También las ventanas pueden modificarse para abrir y cerrar de forma remota.
Sistemas de seguridad y vigilancia
Una casa domótica equipada con un sistema de seguridad activará la alarma cuando salgas de casa, y lo que es más importante, si dispone asimismo de un sistema de detección de movimiento, avisará a la policía si identifica algún intruso cuando tú no estás en casa.
Pero la seguridad no se limita a la presencia de intrusos, sino también a la monitorización de mascotas o vigilancia de personas mayores que estén solas. Con un control remoto de vigilancia se podrá actuar más rápidamente si se producen incidentes o incluso nos permitirá hablar con nuestras mascotas para que se sientan acompañadas cuando pasamos mucho tiempo fuera de casa.
Electrodomésticos
Esperar a que se haga el café por la mañana, a llegar a casa para poner la lavadora o a ver qué te hace falta en la nevera para después salir a comprarlo al súper. Todo esto es historia si vives en una casa domótica, porque podrás programar tu cafetera, tu aspiradora, tu lavadora o que la nevera te indiqué qué productos se están terminando y necesitas reponer.
Eficiencia de la domótica
Como mencionábamos con anterioridad, el fin de la domótica es que los usuarios puedan controlar y automatizar sus hogares de diversas maneras. Y si quienes viven en una de estas casas domóticas pueden programar sus luces para que se enciendan y apaguen automáticamente a ciertas horas del día o cuando detecten movimiento en una habitación, o bien controlar la temperatura incluso sin encontrarse dentro de su hogar mediante una aplicación móvil, no debería extrañarnos el ahorro que esto puede llegar a suponer. Y no solo eso, sino que al tratarse, como hemos matizado, de un sistema interconectado, podemos, por ejemplo, sincronizar la climatización con la apertura y cierre de persianas, toldos y ventanas para aprovechar la luz solar y reducir el coste de los sistemas de refrigeración o de calefacción.
Porque el fin de la domótica no es solamente mejorar la calidad de vida de quienes habitan en él, sino también la eficiencia energética, dado que facilita el seguimiento y control del consumo en tiempo real a través de medidores inteligentes y sistemas de visualización de datos. De este modo podrán realizar ajustes para reducirlo si consideran que este es demasiado elevado.
La domótica en España
Hasta hace algunos años, encontrar unas persianas eléctricas o unos aspersores automáticos estaba restringido a personas que o bien disfrutaban de un alto poder adquisitivo o bien padecían alguna discapacidad que los había obligado a acudir a este tipo de tecnología para poder vivir.
En la actualidad, sin embargo, la domótica abarca mucho mas allá de lo que imaginábamos hace no tanto. Y no lo decimos nosotros, sino el propio sector, que estima para 2024 un incremento de un 300% con respecto a 2020 en cuanto al número de casas domóticas. Esto supondría un 20% de los hogares en España.
De hecho, y según una encuesta realizada por la Unión de Créditos Inmobiliarios, el 11% de los encuestados aseguraban vivir en una casa domótica, mientras que casi la mitad contaban con al menos algún aparato inteligente o sistema automatizado.
Las casas domóticas del futuro que es ya presente
Quienes veíamos las películas de ciencia ficción de finales del siglo pasado soñábamos con las ventajas que la tecnología supondría para nuestras vidas. Es cierto que todavía no disfrutamos de coches voladores, robots que cocinan y limpian la casa ni otras fantasías, pero contamos con drones y robots de cocina y aspiradores, por mencionar solo algunos.
El objetivo de la domótica es que nuestros hogares sean más cómodos, más seguros y más eficientes energéticamente. Esto se traduce en una simplificación y mejoría de nuestra vida al permitirles controlar y automatizar sus sistemas de hogar.
Porque todo cuanto hoy es una fantasía mañana será una realidad, y seguramente mejorará nuestras vidas del mismo modo que hoy disfrutamos de nuestras casas domóticas.
Referencias consultadas
- Casadomo (2021). El 48% de los propietarios en España cuentan con sistemas domóticos en sus viviendas. Recuperado de https://bit.ly/42UlthZ
- Calor y frío (2022). ¿Qué es la domótica? Cómo funciona una casa inteligente. Recuperado de https://bit.ly/3ojs32B
- E-ficiencia (2023). Domótica. ¿Qué es la domótica? ¿Cómo funciona? Recuperado de https://bit.ly/3Ir0X0p