Manchas de moho, pintura descascarillada, grifería oxidada… Un exceso de humedad en casa puede tener consecuencias muy perjudiciales. No solo para tu casa, sino también para tu salud, puesto que propicia la reproducción de hongos y ácaros que tanto afectan a las personas que padecen alergias o asma. Pero una humedad demasiado baja tampoco es beneficiosa, pues provoca sequedad en ojos, piel y mucosas, lo cual incrementa el riesgo de contraer enfermedades respiratorias como gripes y catarros. Mantener, por tanto, la humedad de la casa a un nivel adecuado es fundamental tanto para un buen mantenimiento del hogar como para que gocemos de una buena salud.
Qué es la humedad
Llamamos humedad a la cantidad de vapor de agua que se encuentra en el aire o en una sustancia en particular a una temperatura y presión específicas.
Diferencia entre humedad absoluta y humedad relativa
La humedad absoluta se refiere al vapor de agua que está presente en el aire medido en gramos de vapor de agua por metro cúbico de aire. Esta medida se utiliza principalmente en aplicaciones técnicas o científicas; por ejemplo, para diseños de sistemas de calefacción y refrigeración, ya que la cantidad de vapor de agua en el aire puede afectar la eficacia del sistema.
La humedad relativa, por otro lado, es una medida de la humedad de uso más común y se expresa como un porcentaje de la cantidad máxima de vapor de agua que contiene el aire a una temperatura y presión determinadas. Si, por ejemplo, la humedad relativa es del 50%, significa que el aire contiene la mitad de la cantidad máxima de vapor de agua que podría contener a esa temperatura y presión.
Cuál es la humedad ideal en casa
Según estudios publicados en revistas como Environmental Health Perspectives, los valores de humedad relativa en el hogar deben encontrarse entre un 40% y un 60%. Esta afirmación está sustentada en dos razones:
- Tantos los virus como las bacterias infecciosas que se propagan por el aire y son responsables de enfermedades como el catarro, la gripe o la bronquiolitis se reducen cuando la humedad relativa está entre 40 y 70%.
- La cantidad de ácaros y hongos disminuye a una humedad relativa inferior al 50% y alcanza su pico máximo con un 80% de humedad relativa. La mayoría de hongos dejan de reproducirse por debajo de un 60% de humedad relativa.
Como acabamos de ver, la humedad dentro del hogar no solo es buena, sino necesaria, tanto para nuestra salud. No debemos, por tanto, temer a la humedad, sino asegurarnos de que esté presente en el porcentaje adecuado.
Cómo detectar la humedad en casa
Todos hemos sentido en alguna ocasión el calor o el frío húmedo típico de las zonas cercanas a masas de agua. Quienes vivimos en ciudades costeras lo sabemos bien. Pero estemos más o menos acostumbrados, lo cierto es que no siempre es fácil identificar si la humedad que hay en el hogar es la adecuada. Para ello podemos controlarla con un higrómetro, un aparato de medición de humedad que se puede encontrar en tiendas especializadas en electrónica y dispositivos de medición. Esto es especialmente recomendable en áticos o sótanos, ambos con una tendencia importancia a las humedades.
De lo contrario, es posible que descubramos que tenemos un exceso de humedad cuando ya es tarde, es decir, cuando hemos visto las primeras manchas de moho en los techos o paredes de alguna habitación de la casa. En estos casos, el exceso de humedad puede tener 3 orígenes distintos: la condensación, la capilaridad o la filtración.
Diferencias entre condensación, capilaridad y filtración
La condensación, la capilaridad y la filtración son procesos diferentes que pueden darse en el interior de un edificio.
- Condensación: se produce cuando el vapor de agua en el aire se condensa en una superficie fría, como las ventanas o las paredes exteriores de un edificio. Esto sucede cuando la humedad relativa del aire es alta y las temperaturas en el interior y exterior del edificio son diferentes.
- Capilaridad: se refiere a la capacidad de los materiales porosos, como la mampostería y el hormigón, para absorber y transportar agua a través de pequeños conductos y cavidades. Esto puede ocurrir debido a la presencia de humedad en el suelo o en las paredes, y provocar así la aparición de manchas de moho y la degradación de la estructura del edificio a lo largo del tiempo.
- Filtración: la filtración se trata del proceso mediante el cual el aire y las partículas se filtran a través de los materiales porosos y las aberturas en las estructuras del edificio. La presencia de huecos y grietas en las ventanas, puertas y paredes favorece la aparición de filtraciones. Es el más grave de los 3, puesto que permite que los alérgenos y contaminantes del aire exterior alcancen el interior del edificio.
Aunque condensación, capilaridad y filtración son procesos diferentes, los 3 que pueden afectar a la calidad del aire del interior de la vivienda. Pueden causar también la aparición de manchas de moho en paredes, techos y suelo, así como defectos en la pintura, la mampostería y la madera, e incluso perjudicar a la integridad estructural del edificio si no se toman las medidas necesarias.
Cómo evitar las humedades
Para evitar vernos obligados a realizar incómodas y a menudo costosas reparaciones derivadas de humedades, podemos tomar ciertas medidas que nos prevengan de llegar a tal extremo.
- Ventilación: una ventilación adecuada contribuirá a mantener un nivel saludable de humedad en el hogar. Asegurándonos de abrir las ventanas y puertas regularmente permitiremos la circulación de aire fresco en el interior del hogar. Entre 10 y 15 minutos al día será normalmente suficiente, si bien esto puede variar dependiendo de factores como el tamaño de la casa, la cantidad de personas que la habitan o la calidad del aire exterior, entre otros. En las habitaciones donde la ventilación no sea posible o resulte más dificultosa, como baños y cocinas, es recomendable instalar ventiladores de extracción.
- Impermeabilización y aislamiento: la adecuada impermeabilización de techos, paredes y pisos es fundamental para evitar la filtración de agua y la aparición de humedades. Este es, además uno de los 10 consejos para ahorrar energía en el hogar. Para ello debemos asegurarnos de que no existan grietas o fugas en techos o paredes, y repararlas en caso de que estas se produzcan.
- Control de la humedad: como hemos señalado, debemos mantener la humedad relativa entre un 40% y el 60%. La mejor forma de controlarla es a través de humidificadores o deshumidificadores, dependiendo de las necesidades de nuestro hogar y del lugar geográfico en que se encuentra.
- Limpieza regular: limpiar regularmente las áreas con tendencia a humedades, como baños y cocinas, puede ayudar a prevenir la aparición de moho y hongos.
- Uso de materiales adecuados: los materiales resistentes a la humedad en zonas comprometidas puede ayudar a prevenir la aparición de humedades. Es aconsejable la utilización de pintura resistente al moho en baños y cocinas, así como evitar las alfombras en habitaciones con tendencia a la humedad.
Humedad justa, casa feliz
Como acabamos de comprobar, prevenir la aparición de humedades en casa es sencillo si tomamos una serie de medidas. Dado que esto no garantiza que no vayan a producirse nunca, es conveniente asimismo que nos mantengamos alerta y las atajemos cuanto antes para evitar unas consecuencias más gravosas.
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Referencias consultadas
- Siberzone (s/f). ¿Cuál debe ser el nivel de humedad ideal en casa? Recuperado de http://bit.ly/3Ju5Syx
- Sanysec (2022). Humedad ideal en casa: importancia y beneficios. Recuperado de https://bit.ly/3YEhy6j
- Murprotec (s/f). La humedad en casa. Recuperado de https://bit.ly/3FdpxAf
- Fisiorespiracion (s/f). Cuál es la humedad relativa ideal en casa y cómo conseguirla. Recuperado de https://bit.ly/3mLohy4

Redactora creativa para Emerxente. En la Universidad de Vigo obtuve un título en Economía, en la Escuela Elisava de Barcelona cursé un posgrado en Creatividad y Publicidad, y entre libros y talleres de escritura creativa aprendí a escribir. Trato de enfocarme en lo que marcas y clientes buscan, y aportando mi estilo, hacer que su mensaje llegue con mayor claridad a los lectores.